Y aunque tu ausencia me hable a veces de desconfianza,
es lo único que tengo,
y la hemos trabajado tú y yo con tanta dedicación
que ahora es mi mejor compañera,
y tu belleza nos hace brillar a las dos,
a tu ausencia y a mí.
CADA LÁGRIMA PEDÍA UNA PALABRA
Poemario descatalogado
Ediciones La Equilibrista
Firmado por el heterónimo Marimar López Almagro